- 30 noviembre, 2018
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¿Quién no ha escuchado algún ruido extraño mientras conduce? A esta rutina tan habitual pocas veces se le presta la atención adecuada, ya que si sabemos interpretar estas señales podremos ahorrarnos una avería importante. Por ello, desde nuestra experiencia como taller en Sevilla queremos ofreceros algunas claves para que estéis alerta la próxima vez que esto os ocurra.
Lo primero que hay que tener en cuenta es que para identificar qué ruido es extraño, obviamente, tendríamos que saber cuáles son los habituales, aunque ello no está al alcance de todo el mundo. Además, hay otros factores más o menos complicados de detectar pero que sí aportan mucha información como la clase de ruido (si es un rozamiento, un impacto…), la frecuencia, en qué lugar se localiza o las circunstancias en las que se produce (al arrancar, transcurridos unos kilómetros, con el coche en frío…). Por eso, nuestro principal consejo es que al menor síntoma extraño lo más recomendable es acudir a nuestro taller de confianza.
A continuación vamos a analizar siete ruidos habituales que pueden significar que algo falla en el coche:
1. Sonido de arranque lento: frecuentemente es síntoma de que hay problemas en la batería, es decir, que su carga está próxima a agotarse. Si el sonido se produce en los meses fríos del año, debes tener en cuenta que en esa época está sometida a un mayor esfuerzo para cumplir su función. Además, debes tener en cuenta que su vida útil ronda los tres años, por lo que si hace ese tiempo que no la cambias, la mejor opción es acudir a un taller para reemplazarla lo antes posible.
2. Sonido irregular del ralentí: si este sonido es diferente al habitual puede ser la señal de que sea necesario sustituir los filtros de habitáculo y combustible. Para ello, nada mejor que acudir a un profesional para que, además, nos asegure que el ruido no es consecuencia de algo más grave.
3. Sonido continúo del motor (en frío): si el ruido se aprecia en la zona superior puede ser consecuencia de un problema en las válvulas del motor. Generalmente, este sonido sigue el ritmo del motor (al acelerar aumenta la frecuencia de su intensidad y al contrario cuando frenamos).
4. Sonido estridente delante del coche: si es de una intensidad muy molesta, es muy probable que sea señal de que exista algún tipo de problema en alguna de las correas del vehículo (distribución o servicio). Si esto ocurre, es casi obligatorio detener la marcha y trasladar el coche a un taller mecánico lo antes posible para evitar averías de mayor envergadura.
5. Ruido en el pedal de freno: si escuchas como un crujido o algo parecido a un roce es el aviso de que hay que sustituir las pastillas o los discos. Es cierto que en muchos coches este caso se advierte a través de un testigo de luz en el salpicadero, pero si no es tu caso, debes prestar atención a esta señal o a esta otra: la emisión de un sonido chirriante y metálico a la hora de frenar.
6. Silbido al acelerar: suele indicar un problema en el turbo, una avería de envergadura. Bajo ningún concepto se debería seguir conduciendo. Se suele producir al existir una fuga o un sobrecalentamiento en este elemento.
7. Sonido de impacto en curvas: indica algún tipo de problema en la suspensión o en la dirección del coche. Dado que estos componentes están formados por distintas piezas es casi imposible que alguien sin conocimientos en mecánica pueda detectar donde se produce el fallo. Como en la mayoría de los casos que hemos aquí expuesto, lo mejor también es apostar por un profesional que nos ofrezca un diagnóstico certero ante estas señales.